Cuidar tu alimentación y salud bucodental es muy importante. Tener una dieta sana, equilibrada y rica en nutrientes es importante para la salud general pero también lo es para la salud de nuestra boca y dientes. Por un lado nuestra boca es la primera parada de todo lo que comemos pudiendo llegar a sufrir con alimentos demasiado ácidos o ricos en azúcares. Pero por otro lado el tener una alimentación sana repercute en nuestros tejidos bucales de igual manera que en el resto del cuerpo.

Alimentos beneficiosos para la salud bucodental

En líneas generales hay que decir que todo lo que es bueno para tu salud general también lo es para la bucodental, y viceversa.

Debes saber que no solo influye lo que comas, también cuándo lo comas. Comer entre horas no es buena idea pues en general los alimentos tomados juntos a la hora de la comida causan menos daño en la boca. Al segregarse más saliva, se protege a los dientes de los efectos de los ácidos.

Todas las dietas sanas y equilibradas deben incluir:

1. Las frutas, verduras y legumbres deben de ser como mínimo la mitad de nuestra dieta diaria. Entre ellos destacamos los vegetales de hoja verde ricos en fibra; el consumo de manzana, apio o zanahorias que nos aportan nutrientes y además nos ayudan a luchar contra la placa bacteriana; o los guisantes, las judías o los garbanzos que son fuente también de proteínas saludables.

2. Los cereales, fuente de energía deben de ser un 25% de nuestra alimentación prefiriendo siempre que sean integrales. Arroces, pan, avena…

3. Lácteos que estimulan la secreción de saliva disminuyendo la acidez de la boca, además al son ricos en calcio, vitaminas y ácidos grasos. Aunque se recomienda tomarlos con moderación y bajos en grasas.

4. Las proteínas son importantes para la formación de tejidos como lo son los dientes y encías. Su consumo debe ser entre un 10 o 15 por ciento de nuestra ingesta diaria en forma de carne, pescado, huevos, lácteos, legumbres…

5. Frutos secos, como las nueces, almendras, pistachos o avellanas son ricas en omega3 y además contienen algo nivel de magnesio, un mineral que forma parte de la estructura dental. Preferiblemente hay que tomarlos al natural de forma moderada.

6. Azúcar. La mayoría de los alimentos ya son ricos en azúcar, por lo que su consumo libre no debe de llegar al 10 por ciento diario.

Alimentos que debemos evitar

En líneas generales debemos evitar todos los que contengan demasiado azúcar o sean muy ácidos.

El azúcar al metabolizarse produce una serie de ácidos que debilitan el esmalte y finalmente provocan la caries y este puede ser el primer paso para problemas más graves. En este grupo estarían la bollería industrial, los refrescos, galletas…

Por otro lado los alimentos ácidos pueden erosionar nuestra dentadura, aumentar la sensibilidad, manchar el esmalte… Productos como las bebidas gaseosas, el vino e incluso el limón o la naranja entran en este apartado.

Los alimentos blandos o adhesivos al masticarse es fácil que dejen restos entre las piezas dentales y eso puede a la larga afectar a la estructura de nuestros dientes.

En definitiva disfrutar de una dieta equilibrada y rica en nutrientes nos ayuda a mantenernos sanos y fuertes. Y si a esta le sumamos unos hábitos higiénicos saludables y visitas regulares a tu dentista nos aseguramos de que siempre luzcas tu mejor sonrisa.

Ya sabes que prevenir, siempre, es mejor que curar por ello si necesitas más información sobre hábitos saludables ponte en contacto con nosotros.

Pide tu cita. ¡¡Infórmate sin compromiso!!