El proceso de la Ortodoncia tiene multitud de posibilidades, todas adaptables al paciente. Aquí te contamos algunas claves para saber qué tipo de Ortodoncia sería la ideal para ti.
Tener una sonrisa perfecta se ha convertido, en los últimos tiempos, en una moda. Pero más allá de una sonrisa bonita, conseguir unos dientes bien alineados mejora la funcionalidad de los mismos así como previene la aparición de enfermedades periodontales. Es decir, a parte de por razones estéticas tenemos que cuidar nuestra sonrisa por razones de salud.
¿En qué consiste un tratamiento de ortodoncia?
Es un proceso por el cual conseguimos corregir la posición de los dientes y la anomalía de sus correspondientes huesos.
¿Cuales son los beneficios de unos dientes perfectamente alineados?
Al normalizar la posición de los dientes y el tamaño del maxilar y la mandíbula, los dientes pueden encajar bien entre ellos realizando de forma correcta la masticación de la comida. Al funcionar correctamente todo el sistema los dientes se mantienen saludables garantizando una larga vida de toda la dentadura. También, por supuesto, cumplen una función estética.
¿A qué edad se puede iniciar el tratamiento de ortodoncia?
Generalmente cuando el niño va perdiendo sus dientes de leche, sustituidos ya por los definitivos, el dentista puede empezar a detectar los defectos en la posición de los dientes y sus huesos. Y es a partir de los 7 años hasta la adolescencia cuando la mayoría de los pacientes reciben el tratamieno de ortodoncia.
También es necesario en pacientes adultos, bien por correcciones que no fueron realizadas a su debido tiempo o para corregir el progresivo deterioro de la dentadura.
¿Cómo iniciamos un tratamiento de ortodoncia?
Como en cualquier otra intervención en nuestro centro, comenzamos con un completo estudio previo. La realización de pruebas diagnósticas como fotos intraorales y extraorales, radiografías, cefalometría… nos permiten analizar cada caso y pautar un plan de tratamiento ajustado a las necesidades de cada paciente.
Una vez finalizado el diagnóstico, el paciente junto a nuestra ortodoncista estudiarán todas las opciones de tratamiento existentes eligiendo el óptimo.
¿Qué tipos de tratamientos existen?
Los podemos clasificar en dos grandes grupos: los que se utilizan aparatos removibles y los fijos.
Aparatos removibles
Se llaman así porque el paciente se los quita a la hora de las comidas y de las limpiezas. Su manejo es relativamente sencillo pero sólo sirven para corregir defectos leves o moderados.
El sistema Invisalign® corrige la malposiciones dentales a partir de juegos de férulas transparentes hechos a medida. Es casi imperceptible, cómodo e higiénico.
Aparatos fijos
En cambio los fijos están especialmente indicados para corregir defectos más acentuados o graves. Y entre ellos hay una gran variedad:
Brackets metálicos
Es el tratamiento tradicional en el que el aparato va cementado sobre la cara visible del diente. Es quizás la opción más económica pero es un sistema muy poco estético.
Brackets zafiro
Es un sistema de brackets transparante por lo tanto es altamente estético. Está realizado en microcristales de zafiro que lo hacen muy resistente evitando que se tiñan con el paso del tiempo.
Brackets Damon
(O de autoligado) Permiten no tener que llevar ligaduras metálicas o elásticos. Consiguiendo reducir la fricción y también el tiempo de tratamiento.
Ortodoncia lingual
Y por último la ortodoncia lingual está basada en brackets que se cimentan en la cara interior del dientes.
¿Cuánto cuesta?
El coste total del tratamiento dependerá de la gravedad de los defectos a corregir, de la edad del paciente y también del sistema corrector elegido.
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